Algún día mis sobrinos no podrán creerse que yo creciera sin móvil, consola o internet, igual que en su momento me sorprendió descubrir que mis padres se habían criado sin un triste aparato de televisión o de teléfono. Supongo que es ahora cuando me doy cuenta de que ha corrido un ciclo completo y pertenezco a una generación diferente.
Tiendo a ser optimista y pensar que esta nueva era nos aporta más beneficios que perjuicios. Sin entrar en valoraciones, hoy en día el acceso a la información es brutal. Información que hace sólo diez años era imposible de obtener, a menos que contaras con un colega en la CIA o la NASA.
Eran tiempos en los que si necesitabas saber los horarios de salida del tren, no había otra que llamar por teléfono. Y si el tren en cuestión salía de Llanfairpwllgwyngyll, llamar con un diccionario al lado (edición impresa, por supuesto)
Si en medio de la cena, a ti y tus amigos os daba por discutir en qué año tuvo lugar la decisiva y archifamosa batalla de Hastings, recurrías a la (buena) memoria, a la hemeroteca o a una máquina del tiempo (si de algo me alegro es que internet haya puesto punto y final a este tipo de discusiones de forma limpia e indolora)
Pero hoy en día no sólo tenemos a nuestro alcance ingentes cantidades de información sino que accedemos a ella rápidamente y, en muchos casos, sin coste, gracias a personas que crean y comparten contenidos de forma libre.
Por ejemplo, sin necesidad de salir de la habitación, de comprar ninguna revista, anotarse a ningún curso de cocina ni saber polaco, se puede descubrir y aprender a preparar esta receta.
El resultado salta a la vista:
Esta empanada de manzana tiene tres puntos fuertes: una presentación original y bonita, un relleno sabroso y una masa suave y tierna. ¿Os gustan las manzanas, la canela y el queso en crema? Pues esta es vuestra tarta.
A diferencia de la pasta brisa o pasta quebrada tradicional, esta masa no es crujiente sino que tiene un puntito abizcochado que resulta muy agradable. El relleno de manzana asada es sensacional y el aroma de la canela combina realmente bien.
La receta original emplea pan rallado en el relleno que yo sustituí por almendra molida. Otra estupenda opción es preparar una fina frangipane sobre la que repartir las manzanas.
Ingredientes (para una empanada de 40x35cm, aprox):
Ingredientes para la masa:
* 420 gr harina
* 10 gr levadura química de respostería
* 75 gr tagatosa en polvo (o 150 gr azúcar)
* ralladura de cáscara de un limón grande
* 200 gr queso en crema (tipo Philadelphia)
* 200 gr mantequilla a temperatura ambiente
* una pizca de sal
Ingredientes para el relleno:
* 40 gr almendra cruda molida
* 2 cucharaditas de canela en polvo
* una cucharadita de tagatosa (o 2 de azúcar)
* 9 manzanas maduras y pequeñas (90-95 gr cada una)
* tagatosa en polvo o azúcar glas (para espolvorear)
Preparamos la masa de la empanada mezclando en un bol grande la harina, la levadura química y la ralladura de limón:
Agregamos el queso en crema, la mantequilla troceada y una pizca de sal:
Amasamos todos los ingredientes (a mano o utilizando el garfio de una máquina amasadora) hasta que estén bien ligados y obtengamos una masa elástica y de superficie tersa y suave (unos 8-10 minutos con máquina y el doble a mano, aproximadamente):
Dividimos la masa en 2 mitades. Una de ellas ligeramente más grande que la otra (una hará de base y la otra hará de tapa):
Con ayuda del rodillo extendemos la mitad más pequeña entre dos hojas de papel de horno hasta formar un rectángulo de 40x35cm y la transportamos con el papel a la bandeja de horno:
En un recipiente a parte mezclamos la almendra molida, la canela en polvo y el azúcar (o edulcorante):
Espolvoreamos generosamente la base de la masa con esta mezcla:
Pelamos las manzanas, las despepitamos y las cortamos por la mitad. Como siempre, nos interesa que la fruta esté lo más madura posible. En este caso usaremos piezas pequeñas para poder dividir la empanada en porciones sin cortar las manzanas.
Repartimos las mitades de manzana, boca abajo, sobre la masa y las espolvoreamos con una pizca de canela y azúcar (o edulcorante):
Estiramos la segunda porción de masa igual que hicimos antes. Retiramos el papel inferior, la volcamos con cuidado sobre las manzanas y retiramos el papel superior:
Ajustamos los extremos para que ambas masas coincidan y quede bien marcada la forma de la fruta:
Sellamos los bordes pellizcándolos con los dedos (si sabéis hacer estos bonitos repulgues de empanadillas, mejor que mejor):
Introducimos la empanada en el horno, precalentado a 160ºC con función ventilador (o 180ºC sin ventilador) durante 45-50 minutos o hasta que la masa esté bien dorada.
Si se nos quema antes de tiempo, la tapamos con papel de aluminio:
Retiramos la empanada del horno, dejamos que enfríe y la espolvoreamos con azúcar glas (o tagatosa en polvo)
Con esta pinta, no le negaréis un sitio en la mesa, ¿verdad?
Su aliado natural sería una bola de helado o unas natillas ligeras.
Por dar ideas…
Las manzanas se pueden sustituir por peras (siempre bien maduras), aunque para conservar el bonito efecto visual, procurad que sean lo más redondeadas y pequeñas posible.
Se conserva bien durante un par de días gracias a la jugosidad del relleno, así es que es perfecta para dejarla preparada con un día de antelación.
Tiempo: 45 minutos (preparación) + 45 minutos (horneado)
Dificultad: baja
Helena, tú también compartes libremente tus creaciones. ¿No te habías dado cuenta? Y no solo eso, sino también tu ingenio y tu chispa, esa que me hace pasar un ratito tan entretenido y divertido leyéndote.
Por cierto, la empanada, preciosa, vistosa, facilona y seguramente que deliciosa.
Feliz semana.
Sí, hay un poquito de auto-bombo 😉 Pero todo lo demás es agradecimiento a ti y a los demás que compartís contenidos de forma libre y gratuita.
Muchas gracias por el feed-back, Yolanda.
¡Feliz semana!