Pregunta:
¿Qué ocurre cuando se cruza este pane bianco relleno de tomatitos secos con esta trenza rellena de pesto?
Respuesta:
Que el resultado es una nueva especie gastronómica tan deliciosa como ésta:
La nueva especie es un pan trenzado relleno de salsa pesto, tomatitos secos deshidratados y queso de cabra, que está bueno hasta decir basta.
Todo es bonito y delicioso en esta hogaza: ese veteado, el intenso sabor a albahaca, la miga tierna y esponjosa…
La masa está enriquecida con aceite, leche y huevo, lo que le da una textura esponjosa similar a la de un brioche. Se mantiene fresca de un día para el otro sin ningún problema, de modo que es el pan perfecto para prepararlo con antelación sin miedo a que se reseque.
Demos la bienvenida a la albahaca con una salsa pesto que está para mojar pan…
¡Y qué pan!
Ingredientes para la masa:
* 420 gr harina de fuerza
* 10 gr levadura seca de panadería
* 60 gr agua tibia
* 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
* 125 gr leche tibia
* 1 cucharadita de azúcar (opcional)
* 1 cucharadita de sal
* 1 huevo mediano
Ingredientes para el relleno:
* 4 cucharadas de salsa pesto
* 25-50 gr medallones de queso de cabra (sin corteza)
* 8 ó 10 tomatitos secos en aceite
* queso cheddar, gruyère o emmental
En primer lugar, preparamos la salsa pesto siguiendo estos pasos.
Reservamos.
Mezclamos todos los ingredientes de la masa en un recipiente grande o en el bol de la KA, y los mezclamos bien con unas varillas para amasar o con el garfio de la KA, hasta que la masa ligue bien y se despegue de las paredes del recipiente:
La amasamos ligeramente en el propio recipiente para darle forma de bola y la pasamos a un molde engrasado con aceite, tapado con plástico transparente, donde la dejaremos leudar 1 hora (en un lugar cálido, como, por ejemplo, el interior del horno a 30ºC), o hasta que doble de volumen:
Volcamos la masa en una superficie ligeramente engrasada y la estiramos con el rodillo hasta formar una plancha rectangular de unos 50x30cm:
Extendemos unas cucharadas de salsa pesto sobre la masa, dejando un borde limpio de un par de dedos de ancho:
Repartimos el queso de cabra desmenuzado:
Escurrimos los tomatitos en aceite, los cortamos en trozos pequeños y los repartimos sobre la masa:
Yo utilicé tomatitos secos deshidratados que dejé macerar en aceite de oliva 30 minutos. De este modo se reblandecen y no quedan tan correosos como si los añadiéramos secos a la masa.
Enrollamos la masa por el lado más largo, como si preparáramos un brazo de gitano:
Pellizcamos y sellamos los extremos para cerrar bien el tronco:
Colocamos el tronco sobre una hoja de papel sulforizado, con la unión en la parte inferior, y lo cortamos a lo largo con unas tijeras:
Doblamos el tronco para darle forma de «S» y sellamos los extremos bajo el tronco. De este modo, la hogaza tendrá forma de «8».
El paso a paso está muy bien explicado aquí:
Si preferís preparar el clásico pan trenzado, seguid los pasos de la receta de braided basil pesto bread.
Dejamos que repose de nuevo 30 minutos (en el interior del horno a 30ºC)
Antes de introducir la masa en el horno, podemos espolvorearla con un poco más de rulo de queso de cabra, queso rallado tipo cheddar, emmental o gruyère, y unos cuantos tomatitos secos más:
Horneamos la hogaza a 200ºC durante 10 minutos. Bajamos la temperatura a 180ºC y la horneamos 15 minutos más, o hasta que esté bien dorada.
Si se tuesta demasiado, podemos cubrirla con papel de aluminio.
Consejo: mientras la masa se hornea, abrid la puerta de la cocina para el aroma a albahaca se extienda por toda la casa. Como pasa con el olor de la mantequilla o del anís, el aroma del pesto, el queso y los tomates os mantendrán pegados y salivando sin control frente a la puerta del horno… Una experiecia muy recomendable.
Una vez la hogaza esté lista, la retiramos, la dejamos templar y…
al ataque:
Este es un pan perfecto para acompañar con unas lonchas de queso, de jamón, o para untar con un poco de tomate y aceite o con queso en crema:
Pero también es el típico pan que se toma solo, a pellizcos, hasta terminar con toda la hogaza…
Si os sobra salsa pesto (sólo son necesarias unas cuantas cucharadas para el relleno), podéis conservarla unos días en la nevera cubierta con un plástico transparente (en contacto con la superficie de la salsa, para evitar que se oxide) Un método de conservación a largo plazo consiste en cubrir la salsa con aceite de oliva: la capa de aceite actuará como conservante y mantendrá la salsa fresca durante semanas.
De todas formas, como imagino que repetiréis esta fantástica hogaza más de una vez, os recomiendo que tengáis el pesto a mano…
Buen provecho.
Enviado a Yeast Spotting.
Tiempo: 1 hora 30 minutos (leudados) + 25 minutos (horneado)
Dificultad: media
Tinc pesto congelat….tinc tomaquets secs a la despensa….tinc farina….i tinc ganes de fer-ho!! divendres cau, ja t´explicaré 🙂
Fes-lo i ja m’explicaràs: està boníssim!
😉
Petons
Helena….impressionant! El vaig fer sense formatge (a la meva parella no li agrada), i va quedar espectacular. Gràcies (de nou) per una altre recepta boníssima.
Para comérselo a pellizcos!
Aunque mi bisabuela tenía un dicho: «En la casa que no hay gobierno, a pellizcos se va el pan tierno…»
Ya os contaré, porque los ingredientes me encantan todos…
Un besote!
Gracias Susana, y muy cierto el dicho (sospecho que en mi casa no hay gobierno ninguno…)
Besos 😉