En la receta de empanadillas fritas de manzana, os prometí una versión más ligera de otra receta-bomba muy conocida (y deliciosa)
Pues aquí está:
¿Quién no se ha rebozado los dedos de azúcar alguna vez untando churros en una taza de chocolate bien espeso?
Esta receta utiliza una masa diferente de la clásica (compuesta solamente de harina y agua) más parecida a la pasta choux que se emplea, por ejemplo, para hacer profiteroles o lionesas.
Los ingredientes son agua (la pasta choux combina agua y leche), mantequilla, harina y huevos. Pero la diferencia fundamental con es que esta masa se hornea en lugar de freírla.
Puede parecer un invento un poco extraño (¿no es precisamente el churro el Rey de las Fritangas?), pero como alternativa no está nada mal.
Es verdad que esta masa contiene mantequilla y huevo, así es que tampoco es para ponerse a saltar, pero la ausencia de aceite ahorra grasas, dinero (yo, al menos, acabo tirando el aceite sobrante porque no sé en qué más utilizarlo) y tiempo (¡no hay que fregar la cazuela después!)
Eso sí, no intentéis hornear unos churros tradicionales hechos a base de harina y agua porque la cosa no funciona: la masa queda correosa y bastante incomestible.
En cambio, para eso la pasta choux es perfecta, aunque no esperéis unos churros crujientes y aceitosos. La textura es mucho más tierna y esponjosa, y la miga es más ligera y alveolada, como la de unos buñuelos de viento.
Eso sí, valen perfectamente para mojarlos en un buen chocolate caliente (o en crema pastelera: caray, ¡eso SÍ es un descubrimiento!)
Para que parezcan churros auténticos y tengan esa forma estriada, utilicé una boquilla de estrella de 8mm. No es imprescindible, pero quedan más bonitos.
Como la masa es ligera y contiene bastante aire, podéis darle forma de bolitas y preparar buñuelos rellenos con esa crema pastelera que está diciendo «cómeme»…
Ingredientes (se obtienen 370 gr de churros, aprox):
* 250 ml agua
* 110 gr mantequilla
* media cucharada de tagatosa (o una cucharada de azúcar)
* una pizca de vainilla en rama
* 140 gr harina común
* 3 huevos medianos
* tagatosa o azúcar (para rebozar)
Calentamos el agua, la mantequilla troceada y la vainilla en un cazo, hasta que rompa a hervir:
Bajamos el fuego al mínimo y añadimos la harina (mezclada con el azúcar o tagatosa), de una sola vez, removiendo rápidamente con unas varillas o una espátula al mismo tiempo:
Poco a poco la mezcla comenzará a espesar y a separarse delas paredes del cazo hasta formar una pasta compacta y densa:
Retiramos el cazo del fuego y añadimos los huevos, de uno en uno, removiendo simultáneamente con las varillas para que se integren bien:
La masa quedará más suelta, pero espesa:
La introducimos en una manga pastelera con una boquilla de estrella:
Sobre una bandeja cubierta con papel de horno vamos formando los churros de la longitud deseada y cortamos la masa con unas tijeras:
Introducimos la bandeja en el horno, a 180ºC durante unos 20 minutos, o hasta que comiencen a dorarse.
Ojo, no porque estén más tostados estarán más crujientes. Al contrario, es preferible no sobre cocerlos en exceso o quedarán duros:
Los sacamos y los espolvoreamos con azúcar (o tagatosa) o con una mezcla de azúcar y canela.
Estos churros son más blanditos y más ligeros que los clásicos churros fritos en aceite. De hecho, podéis llamarlos churros «abuñuelados» o buñuelos «achurrados».
Lo mejor es consumirlos recién hechos o en el mismo día, antes de que la masa se reseque.
Espero que los probéis y os gusten 😉
Tiempo: 10 minutos (preparación) + 20 minutos (horneado)
Dificultad: baja
Espectacular!!!!!! y más hechos al horno…
Bss
Qué buenos, Helena!!
Nunca se me hubiese ocurrido, es que me has dejado boquiabierta, me encanta la idea y además, al horno, sin fritura.
Chica que fotos tan lindas y lujuriosas te han quedado, enhorabuena.
Me gustan los churros pero salvo los de Bonilla, no los como en ningún sitio porque los aceites me matan, pero me comería un par de los tuyos, eso sí, con bastante crema pastelera y mojados en chocolate :)))))
un biquiño
Me alegro de que te guste, Isa 😀 Con el aceite sobrante nunca sé muy bien qué hacer y acabo tirándolo… una pena. Esta versión es, al menos, un ahorro. La textura es diferente, pero están muy buenos.
++ Bicos
Pero que ricura!! Y echos al horno! Quedan perfectos, más que los de la clásica churrería! me encanta tu propuesta. Por no decir lo de bañarlos en crema pastelera, todo un acierto, creo!! Con chocolate también estupendos, claro! Petons
I tant, Marina: visca la crema pastissera! (i cassolana, encara més)
Petons 😉
En casa de mis padres es un clásico tomar churros con chocolate en Diciembre. Nunca los he preparado pero viendo tu post es más sencillo de lo que creía, así que este año me toca a mí 😉
Besos y a disfrutar de esta delicia!
La verdad es que me han entrado ganas de probar esta receta, seguro que resulta más ligera que la versión frita, porque así, a puro ojímetro, creo yo que al freirlos se gastará más cantidad de aceite, aunque el unte en chocolate o en crema pastelera tiene que ser mortal, por lo rico que debe estar.
Y cuando te sobre aceite no lo tires, guárdalo en tarros para hacer jabón o dáselo a alguien que lo haga. ¡Qué pena que no me lo puedas dar a mi! jajaja
Besos
Cristina
Caray, Cristina, no sabía que se pudiera aprovecha el aceite usado! Alucino con la de trucos que sabes, ¡se nota que eres química! 😀
Besotes
Estos churros, con la pasta choux, son como los italianos, los zeppoles, a mi Padre le fascinaban, a mi «churrera» irredenta, me gustan todos, y estos tienen ese toque a mantequilla irresistibles y además con lo reducido del horneado en grasa ganan mucho!! Para mi lo más y los hago cada vez que puedo eso si, en casa no perdonan si llego a hornearlos, pero los haré para mi!
El paso a paso ya sabes, mi debilidad siempre.
Un abrazo enorme.
Aaaah, como los italianos (eso me hace pensar en los «carquinyolis»/»cantuccini» y la de recetas dulces que compartimos con ellos!) Yo no pruebo los churros fritos desde pequeña… y también íbamos mi padre y yo a la caseta del chucherro del barrio los domingos a comprarlos 😀
+Besotes
que rico!! otra receta que probaré.. mi abuela hace con este masa o al menos se le parece las «bombas de crema». Se pueden rellenar de crema pastelera, nata montada o como nosotros con dulce de leche. Que recuerdos mas bonitos me trae! gracias por compartir estas recetas!
I’ve never made churros but now I want to, these look scrumptious!
¡Qué pintaza! Ya me estoy imaginando desayunando esos deliciosos churros con chocolate y se me hace la boca agua. Lo malo es que ya estamos casi en verano y las temperaturas que tenemos en Canarias no acompañan pero los guardo para invierno!
Besos
Bueno, bueno, bueno, Helena. No veas las semanas que llevo esperando tener tiempo para venir a escribirte lo preciosos que me parecen estos churros-choux. Te han quedado espectaculares y ligeros. No te quepa la menor duda de que se los pienso preparar a mi padre, que seguro que le encantan 😉
Besos preciosa. Paula
¡Gracias Paula! Quién iba a pensar que con pasta choux se podían hacer churros, verdad? 😉
Besos
Adorei estes churros de massa -choux ,ficaram lindos
Vou levar a receita pois quero muito fazer
Bom fim de semana
bjs
Hola Helena, me he encontrado tu página y que delicia, estoy empezando en esto de vivir sin azúcar y no he probado muchos postres aún, pero éstos se ven para hacer el próximo invierno! gracias y estaré visitándote.
Buenísimos!! Los hice hoy (aunque la forma me salió un poco churro valga la redundancia 🙂
Me alegro que te gusten! Ahora que estoy más suelta con las fritangas, tengo que probar a hacer churros auténticos (muchos más fáciles que estos, la verdad) 😉
Muchísimas gracias por la receta!!
A mí me pasa lo mismo que a tí, nunca sé qué hacer con el aceite de freir los churros. Suelo guardarlo unos días por si vuelvo a hacer churros pronto, pero al final acabo tirándolo. Y además de eso, odio el olor a fritanga que me queda en el pelo, la ropa… Vamos que aunque me encantan los churros, me da mucha pereza hacerlos por todas esas razones (por no entrar ya en el tema de las terribles quemaduras que pueden producir).
Así que esta receta sorprendente y totalmente inesperada me ha dejado maravillada. Ya no hay escusa para no tomarse un buen chocolate a la taza con sus correspondientes churritos calientes… ñam, ñam….
Gracias de nuevo!