Esta receta ha sido una excusa para probar el ricotta casero que nos enseña a hacer Esther en su estupendo post de Directo al Paladar: los pasos son tan sencillos que parece mentira que tenga que salir algo aprovechable y tan bueno. Es bastante difícil encontrar ricotta original en los supermercados (yo estoy cansada de buscarlo), así es que saber hacerlo en casa nos puede solucionar mucho la vida.
Este queso ricotta casero no tiene nada que ver con el requesón o el queso fresco comercial: se parece más al mascarpone por su sabor suave y delicado, nada ácido, y su textura cremosa.
Combina especialmente bien con verduras, y por eso me he decidido a utilizarlo como relleno de estos deliciosos triángulos de hojaldre, espinacas y jamón:
El queso se funde con el calor del horno y el relleno resulta increíblemente sabroso (sin necesidad de hierbas aromáticas ni complicaciones) y muy cremoso.
Si no tenéis a mano queso ricotta ni podéis o queréis prepararlo, se puede recurrir al mascarpone o un queso cremoso tipo Philadelphia.
Estamos en pleno mes del #Greenslove bloghop y hay que aprovechar las verduras de temporada, así es que animaos a probarlos 😉
Ingredientes (para 30 piezas, aprox):
* 3 láminas de hojaldre
* 300 gr espinacas frescas lavadas y cortadas
* 250 gr ricotta fresco
* 120 gr jamón york o fiambre de pavo
* sal y pimienta negra molida
Ingredientes para el queso ricotta:
* 500 ml leche entera
* 200 ml nata para cocinar (35,1% m.g.)
* una pizca de sal
* 2 cucharadas soperas de vinagre de vino blanco (de buena calidad)
En primer lugar tenemos que dejar listo el queso ricotta. Para ello forramos el interior de un colador grande (yo utilicé un escurridor de pasta) con gasas de farmacia. Con una capa de gasas basta, no queremos que sea demasiado tupida.
Calentamos en un cazo la nata y la leche con una pizca de sal.
En cuanto rompa a hervir añadimos las 2 cucharadas soperas de vinagre de vino blanco y revolvemos con unas varillas. A los 10-20 segundos apagamos el fuego y dejamos que el vinagre corte la leche y empiecen a formarse grumos (este proceso puede tardar unos minutos):
Volcamos la nata en el colador forrado con gasas y dejamos que vaya drenando y soltando todo el líquido por lo menos 2 ó 3 horas:
Transcurrido ese tiempo el queso se habrá cuajado y ya podréis retirarlo sin problemas y guardarlo refrigerado en un recipiente hasta su utilización en la receta:
Con estas cantidades de nata y leche obtenemos aproximadamente sobre unos 225-250 gr de queso, la cantidad perfecta para rellenar los saquitos de hojaldre.
A continuación seguimos preparando el relleno.
Vertemos un chorro de aceite en una cazuela y sofreímos las hojas de espinacas, cortadas y lavadas. Salpimentamos:
Añadimos el fiambre o pechuga de pavo cortado en tiras, lo mezclamos bien y dejamos que se sofría unos 10 minutos más:
En un bol mezclamos las espinacas con el queso y reservamos:
Sacamos de la nevera la primera lámina de hojaldre y con ayuda de un rodillo la estiramos más aún para dejarla bien fina.
La cortamos en 5 tiras de unos 3 ó 4 dedos de ancho:
Ahora comienza el proceso de relleno. Son los mismos pasos que para rellenar un briouat de pasta brik. Seguro que hay un montón de vídeos en You Tube donde se explican los pasos de maravilla, pero yo lo he hecho más o menos por intuición:
Comenzando por el lado izquierdo:
Colocamos una cucharadita de relleno en el extremo de una de las tiras:
Doblamos la tira de hojaldre hacia arriba formando un triángulo:
Doblamos el triángulo sobre sí mismo hacia abajo:
Y volvemos a doblarlo hacia arriba:
De este modo el saquito queda cerrado en todas sus esquinas sin que asome el relleno. Se trata de mantener lo máximo posible la forma triangular para que la masa tenga un aspecto bonito y recogido.
Ya podemos cortarlo con un cuchillo y sellar los bordes de la masa con los dedos:
Obviamente, si queréis dar otra forma a los saquitos, adelante.
Continuamos el proceso con las demás tiras de hojaldre del lado izquierdo y después empezamos desde el extremo derecho con las que nos quedan cortadas, siguiendo los pasos a la inversa: pliegue hacia abajo, hacia arriba y de nuevo hacia abajo (tendría que haber grabado un vídeo, pero no tenía manos…)
Los pintamos con aceite de oliva y los espolvoreamos con queso en polvo, semillas de sésamo o amapola:
Repartimos los saquitos sobre una bandeja cubierta de papel sulforizado y horneamos a 225ºC unos 10 minutos o hasta que la masa se haya hinchado y esté dorada.
Los retiramos con cuidado y los dejamos templar sobre una rejilla.
El momento perfecto para comerlos es cuando están todavía calientes (siempre podemos volver a calentarlos un poquito en el horno si los hemos preparado con mucha antelación)
He utilizado masa de hojaldre porque me gusta mucho su textura quebradiza y los saquitos quedan así muy tiernos y esponjosos, pero podéis emplear pasta brick.
Al relleno se pueden añadir champiñones laminados, huevo duro troceado, pimiento morrón… o darle un toque más dulce con la incorporación de pasas y nueces.
En definitiva, un aperitivo estupendo para los enemigos de las verduras.
Tiempo aproximado: 15 minutos (horneado)
Dificultad: baja
Those look like little pockets of happiness! I love treats like this:-) I love that you made your own ricotta, what a fun idea:-) Take care, hugs, Terra
Helenaa! no tenía ni idea de como hacer ricotta en casa pero me ha encantado la idea!! y estos bocaditos son criminales a estas horas! una deliciosa combinación! 😉
Un besito!!
Ricos i fáciles de preparar, Pilar. Estupenda receta!
Me has reavivado las ganas de hacer queso casero…….
Que buenisima pinta.
Besos.
Como me ha gustado esta receta! espectacular! esta quiero hacerla… mmmm
Buenísimos, Elena !!!! Me parece una combinación de ingredientes perfecta, al menos a mi me encanta, y en hojaldre, ñam ñam Delicioso.
Un beso
Uhmmmmmmmmm qué bocaditos tan deliciosos. Me ha encantado la idea de hacer el ricitta en casa. No tenía ni idea de como se hacía. Gracias por la aportación.
Que tengas un buen fin de semana
Quin aperitiu tan fantàstic, m’encanta. Gràcies per explicar-nos com preparar la ricotta.
Petons
Ostres, m’havia perdut l’entrada de la ricotta de l’Esther! M’encanta poder-ho fer tot a casa, nyam, nyam!! Aquests mossets que ens presentes m’encanten!
Petonets reina
Sandra
Quina bona pinta m’encanten!!
Susanna.
Que deliciosa receta, y encima con el queso casero, que la hace perfecta
Besos
Esto es un manjar! Sería un aperitivo perfecto! Con lo que me gusta la ricotta, las espinacas y el jamón… y todo esto en un hojaldre! mmm
Me parecen deliciosos para el aperitivo.
La mezcla de queso, espinacas y hojaldre la encuentro deliciosa.
Que bueno lo del queso helena!! No lo había visto! Desde luego es una idea genial, el ricotta me encanta y estos saquitos son una delicia!!
Yo también leí la entrada sobre la ricotta casera y me la guardé porque me atrae mucho hacerla en casa, y ahora viendo tus hojaldres rellenos ya no puedo resistirme a intentarlo! se ven estupendos! un beso guapa y que tengas una buena semana.
Que preciosidad! Como haces para que te queden tan crujientes… son divínos! Besos
Perfect appetizers and a great tutorial to make ricotta!!Will be trying this for sure 🙂
estupendo! un pastel con ricotta casera y espinaca parece rico y fabuloso! 🙂
Gracias por vuestros comentarios!
La verdad es que ha sido un placer preparar el queso ricotta. Ya lo he hecho 3 veces y aunque hay que cogerle el puntillo, sale estupendamente. Al precio que va el mascarpone, es una buena alternativa 😉
Besotes
La espinaca me gusta de todas las maneras pero ya si es envuelta en hojaldre ni te cuento. Magnífica receta.
Besos.
Tinc pasta de full a la nevera i no sabia què fer!! aquesta és una bona idea!! Quina pinta! Marta
Me has creado la necesidad de preparar ricotta en casa…qué maravilla de bocaditos!!
Qué rico Helena… qué apetitoso…
Tomo nota!!