Algún goloso habrá leído sin querer «muffins rellenos de trufa»… pero no va por ahí la cosa (esta vez). Y es que aprovechando esta fantástica época de explosión frutal (aún colean las naranjas y mandarinas, abundan cerezas y fresas y ya aparecen los primeros melocotones y ciruelas) se me ha ocurrido preparar estos muffins rellenos de fruta como alternativa primaveral a los (deliciosos) muffins rellenos de chocolate.
Estos muffins son tan jugosos que resultan ideales para degustar solos: la fruta les aporta humedad y no están nada resecos ni forman esa bola difícil de tragar que se nos atasca en el gaznate. Por supuesto, un chocolate a la taza siempre ayuda a «pasarlos» mejor…
En este caso los he llamado «muffins» porque es más fácil rellenar magdalenas si son grandes (para eso he utilizado una bandeja de muffins en lugar de moldes individuales más pequeños). Espero que disfrutéis de la receta.
Ingredientes para la masa (12 muffins aprox.):
* 250gr harina con levadura
* 150ml leche
* 100ml aceite de girasol
* 2 huevos
* 1 cucharada sopera de sacarina líquida (o 200gr azúcar)
* 1 vaina de vainilla natural
Ingredientes para el relleno:
* 3 fresones
* medio kiwi
* medio mango
* maizena
Esta receta es tan requetefácil que no tiene misterio. Los únicos consejos que se me ocurre dar son:
1º Utilizar harina con levadura incorporada: así nunca nos equivocaremos con la cantidad de levadura química a utilizar (un sobre, medio, una cucharada…) Además, ya viene integrada perfectamente en la levadura y a mí al menos me da mejor resultado.
2º Espolvorear la fruta troceada con maizena o harina para que no tiña la masa ni se hunda en el fondo de nuestro muffin.
3º Trocear la fruta en pedazos no muy pequeños porque si no, el calor la convertirá en compota (especialmente las fresas).
Empezamos:
1º En un bol cascamos los huevos y añadimos la leche, el aceite y la sacarina (o azúcar). Mezclamos bien y añadimos, poco a poco, la harina con levadura, batiendo al mismo tiempo (mejor con unas varillas eléctricas) hasta que tengamos una crema espesa.
2º Troceamos la fruta en pedazos no demasiado pequeños, la colocamos en un vasito y la espolvoreamos con maizena o harina. Aquí conviene no toquetear la fruta con los dedos porque se deshará y nos quedará una pasta pegajosa: sacudid el vaso con unos golpecitos para que quede bien rebozada y listo.
3º Colocamos las cápsulas de muffins en la bandeja y vertemos una capa de crema en el fondo. Colocamos un poquito de fruta y cubrimos con más crema.
4º Horneamos a unos 180º-200º durante 10-15 minutos, a media altura y el calor en la parte inferior del horno. Durante los últimos minutos podemos gratinarlos para que tomen un color dorado bonito.
5º Retiramos y dejamos enfriar. Aguantaos, están mejor fríos y se despegan más fácilmente de la cápsula.
Podéis utilizar la fruta que queráis: melocotón, cerezas, piña… Cuanto más jugosa sea la fruta, más sabroso será el muffin. Y cuanto más intensa de color, más «fotogénico» quedará.
Tiempo: 30 minutos
Dificultad: baja
Un saludo desde Venezuela!. Estoy siguiendo tu blog y me parece genial lo que publicas. Salud y mucho éxito, sigue adelante!. Tengo pendiente preparar en casa los tomates rellenos que publicaste hace días y ahora estos muffins se los pediré a mi cuñada 🙂
Antonio
Muchísimas gracias!!! Qué ilusión que te gusten las recetas, me alegro un montón, eso me da muchos ánimos ;-D
Espero que las explicaciones y las fotos sean claras. Si tienes cualquier consulta, no dudes en preguntar.
Saludos y bon profit!
Hola Helena, las explicaciones son excelentes … y ni hablar de las fotografías 🙂 geniales. Muchas gracias por tu disposición.
Saludos
ACABO DE ENCONTRAR TU BLOG Y ME ENCANTO, YA QUE SOY DIABETICA Y ME GUSTARON MUCHO TUS RECETAS, TU CREES QUE PARA LOS DIABETICOS, SERA MEJOR HACER LA REPOSTERIA CON HARINA INTEGRAL?
SALUDOS
MARTHA
¡Hola Martha! Me alegra que las recetas te sean útiles.
Tanto la harina blanca como la integral contienen la misma cantidad de carbohidratos, de modo que si eres insulinodependiente, tienes que adminitrarte la misma cantidad de insulina. Lo que ocurre es que las harinas integrales (como la pasta o el arroz integral) son más ricas en fibra y eso ayuda a que la absorción de glucosa en sangre sea más lenta y no provoque «picos».
Saludos!